
Con Jesús por la mañana
Con los hermanos. Acoge el nuevo día que comienza haciendo lugar en tu corazón a tus hermanos, ellos son signo del amor del Señor. “A través del diálogo podemos aprender a ver que el otro no es una amenaza, sino un don de Dios, que nos interpela y pide ser reconocido. Dialogar ayuda a las personas a humanizar las relaciones y a superar las incomprensiones” (Papa Francisco). Las diferencias no son amenazas sino oportunidades para enriquecernos y completarnos unos con otros. “No es un dios de muertos, sino de vivientes” (Lc 20, 27-40). Ofrece por la intención del mes. Padrenuestro…